miércoles, 29 de junio de 2016

Las mariposas





 M a r i p o s a s

¿A quién se le ocurriría fabricar Mariposas?
¿Esas volátiles criaturas,
tan sutiles que con tocarlas se estropean?

Esos adornos del jardín
que vuelan aplaudiéndose,
y cuyo aplauso es silencioso.

Las hay de alas celestes,
las hay de alas rubíes;
y también  de alas transparentes
como el vidrio.

¿Pudieron las Mariposas 
inventarse a sí mismas?
¿Surgieron ellas de la nada
sin previa diagramación
ni previo Artífice?



Revolotean por la campiña
miles de Mariposas
de todos los siete colores principales…

Como si el Arco-Iris
se hubiera vuelto picadillo,
y el picadillo se hubiera
vuelto Mariposas.

¿Quién sirvió néctar
en el cáliz de las flores,
néctar que al mismo tiempo
es almíbar y es perfume?

Los insectos necesitan flores,
y las flores  insectos.
¿Quiénes existieron antes?
¿O insectos y flores
aparecieron simultáneamente?

Sobre un clavel rosado
acaba de posarse
una bella Mariposa Monarca;
desplegó su diminuta espiral gustativa
y libó un sorbo de líquido placer.

Se unió más tarde
a su alado compañero,
y así perpetuarán
la pulcritud y la alegría.

¡Gracias, Artista Invisible,
por tu fascinante creación:
las Mariposas!



3 comentarios:

  1. Gracias por tan bellas palabras y son luz en estos momentos de oscuridad

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  2. El poema me pareció muy bonito e interesante porque a través de el pude trasmitir a mis estudiantes las maravillas de la naturaleza.

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  3. Hermoso poema, transmite mucha paz, esperanza y gratitud a Dios por su creación perfecta.

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